Se trata de un juego de desafíos minimalista basado en un motor de física. Los jugadores controlan a un personaje con forma de cápsula, mantienen el equilibrio sobre un estrecho tablero de madera, y confían en su habilidad y paciencia para salir poco a poco de la habitación oscura. Cada paso es un reto, y cada fallo traerá consigo una gran frustración.